Burgos tiene mucho que celebrar en el Curpillos

Hoy queremos presentaros una fiesta muy, pero que muy burgalesa. Se trata de la Fiesta del Curpillos o Corpus chico y es especial porque en ella se mezclan lo sagrado y lo profano.

Es una de las fiestas más esperadas por los burgaleses

Y si no fíjate en estas imágenes de hace "unos cuantos años"... Así se celebraba a finales del siglo XIX.

La celebración tiene lugar el viernes siguiente al Corpus Christi y comienza con los típicos actos protocolarios y con la ceremonia religiosa en uno de los escenarios más bonitos de la ciudad: “El Real Monasterio de las Huelgas”.

La abadesa del monasterio recibe a las autoridades tras la formación de las tropas. Tras ello, tiene lugar la celebración religiosa y se finaliza con la procesión.

Pero no es una procesión al uso, no. En ella podrás conocer a los Gigantillos, los Gigantones, los maceros, danzantes, dulzaineros…. Y desde luego las autoridades de la ciudad. Incluso se saca de procesión el Pendón de las Navas de Tolosa, que es custodiado en el Museo del monasterio.

Hemos hablado de lo sagrado y ¿lo profano?

IMÁGENES   Lumiago  /Archivo Municipal de Burgos

En el parque del Parral podrás disfrutar de la romería popular que tiene lugar tras los actos sacros.
Y es que la ciudad al completo se traslada a esta cercana arboleda para degustar múltiples viandas típicas de nuestra gastronomía como son la morcilla, morro, chorizo y desde luego, todo ello regado con vino y cervezas de nuestra tierra.

Ven al Curpillos, ven al Parral

¿Te la vas a perder? ¡Te esperamos para celebrarlo contigo!